En este blog podreis encontrar cuentos para los niños y no tan niños.
Todos ellos salidos de la cabeza de un hombre de más de 83 años, escritos con el cariño y la ilusión del abuelito Valentín, que ha cumplido su deseo de publicar sus textos en internet y ha publicado un libro con parte de estos cuentos.
Con esto se hace realidad su sueño de que cuando le falte la vida le quede la palabra.
El viejo hurón
iba por el campo solo y triste desde que el cazador lo abandonó por viejo y
lento. Recordaba cuando entraba en las madrigueras y hacía huir a los conejos,
para facilitar el trabajo de aquel que ahora lo había abandonado. De pronto de
un matorral salió un conejo, que al verlo se quedó aterrado y paralizado
esperando el ataque. Pero el hurón le gritó: - No temas amigo, es peor la soledad
que el hambre y no te haré ningún daño, yo solo quiero charlar. El conejo con recelo
se acercó a su ancestral enemigo, y chocaron sus patas en señal de paz. El
conejo le dijo: - Para calmar el hambre prueba esas moras maduras, y espero que
te gusten. El hurón por el hambre se decidió a probar; al principio aquello
le pareció fatal…pero al rato aquel saborcillo dulce no le pareció tan malo.
Nadie hubiera pensado ver a un conejo y un hurón en aquel campo
compartiendo su comida y chocando sus patas en promesa de armonía y paz.
¿Aprenderán los humanos alguna vez la lección?. Tendrían que ser tan nobles y
sinceros cómo lo fueron un día, ¡¡Un conejo y un hurón!!. Y cómo así ocurrió,
ahora se lo cuenta a sus queridos niños (y mayores)…