LA GOLONDRINA PECHO BLANCO
La
golondrina Pecho Blanco, y sus tres
amigas, revoloteaban muy contentas. Otra vez llegaba el calor, para volver
juntas al bonito pueblo donde tenían sus nidos. Pecho Blanco recordaba –ya
algún tiempo atrás—cuando haciendo su nido en el alero de aquel caserón,
escuchó el llanto de un pequeñín. Voló cerca de la ventana, y vió a un precioso
niño, al que todos llamaban Miguel. Al instante decidió que le ayudaría. Cuándo
Miguel estaba en la calle,(a veces con algo de susto de sus papás)…volaba a su
alrededor limpiando el aire de mosquitos que pudieran perjudicar a Miguel.
Cada año, le
costaba más trabajo reconocer a Miguel…¡como crecía “su niño”!.
Cuando ya
estaban en el pueblo..sus amigas, y ella, se asustaron al ver un grupo grande
de gente gritando..¡¡GOL!!, y un montón de niños,--vestidos todos igual—abrazando
a otro. ¡¡Y en el abrazado, reconoció a “su Miguel”!!.
La alegría,
y el orgullo, le quitaron el cansancio del largo viaje, desde el lejano lugar
donde pasaba el invierno. ¡¡Que mayor estaba ya su Miguel!!.
Pero, un
temor le asaltó….¿tendría fuerzas para volver otro año más al pueblo?.
Entonces,
una de sus amigas, llegó llorando. ¡Su nido ya no estaba!, el balcón lo habían cerrado
con cristales.
Los pueblos,
crecen y se modernizan…¿Pero qué será de las alegres golondrinas?.
Si las
eliminamos…¿Quién limpiará el aire de mosquitos a otros niños, igual que Pecho
Blanco hizo con Miguel?....Esta pregunta se la hace a todos…
El abuelito Valentín.
No hay comentarios:
Publicar un comentario